En un preocupante incremento, los crímenes de odio contra cristianos en Francia han alcanzado niveles alarmantes. Recientemente, un incidente en un pueblo francés ha destacado esta creciente tendencia, donde una estatua de la Virgen María fue encontrada decapitada y los bancos de la iglesia incendiados.
Este incidente, que tuvo lugar menos de dos meses después de un informe que reveló cerca de 1.000 crímenes de odio contra cristianos en Francia durante el año anterior, ha generado conmoción en la comunidad local. Los bomberos locales lograron extinguir el fuego y retirar los bancos y sillas dañados de la iglesia, que tuvo que cerrar temporalmente, afectando incluso un servicio funeral que tuvo que ser reubicado.
No es la primera vez que esta iglesia ha sido objeto de vandalismo. Incidentes anteriores, incluida la decapitación de estatuas en 2022, han sembrado preocupación en la comunidad local y más allá.
Un informe del Ministerio del Interior de Francia reveló un aumento del 32 por ciento en crímenes racistas, xenófobos o antirreligiosos en 2023, con casi 1.000 crímenes de odio antirreligiosos conocidos, la mayoría dirigidos contra propiedades como edificios de iglesias y cementerios.
En respuesta a este preocupante aumento, el gobierno francés movilizó a 10.000 fuerzas de seguridad para la Semana Santa en Pascua. Anja Hoffmann, directora ejecutiva de OIDACE, expresó su preocupación por el aumento de los crímenes de odio antirreligiosos, atribuyéndolo al secularismo radical y la influencia del islam radical.
OIDACE ha documentado casos de ataques incendiarios, vandalismo severo y profanación de cruces públicas y cementerios con escritos islamistas. La policía francesa ha aumentado la seguridad en torno a festividades cristianas debido a la tendencia de los edificios de iglesias que se convierten en objetivos de terrorismo y violencia.
Los crímenes de odio antirreligiosos en Francia han promediado alrededor de tres incidentes por día, con aproximadamente 1.000 incidentes registrados anualmente. Esta preocupante tendencia subraya la necesidad de una acción concertada para proteger la libertad religiosa y la diversidad en Francia.
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